El otro día mi madre me mandó a que hiciera un petitorio a la secretaría de "Medio ambiente" de mi Merlo. Mediante una carta muy amablemente redactada le sugeríamos al municipio que se pegara una vueltita por el frente de mi casa y que se fijaran si el álamo enorme de la vereda no necesitaba un cambio de look ya que sus ramas amenazaban la integridad física y moral de nuestra familia, la de los vecinos, la de los perros que renguean de puro vicio, la de los peatones ocasionales o la de algún vendedor de sandias y su respectivo caballito. Muy cordialmente uno de los empleados recibió mi carta, le puso un sello y me dijo:
- En la semana estará pasando el camión de raleo para evaluar el estado del álamo
- Genial, dije yo y entretanto pensé "ya que estoy en la secretaría de medio ambiente le voy a preguntar si saben qué corneta hacer con las pilas gastadas" -Disculpá que te moleste de nuevo, pero ¿el municipio no cuenta con algún programa o lugar donde pueda llevar las pilas, porque contaminan un montón, las guardo, pero no sé dónde tirarlas ni qué hacer con ellas.
Con cara estupefacta me miró y me respondió:
-Emmm, no, pero esperá que averiguo -dio media vuelta hacia el escritorio de atrás y le preguntó a una mujer -Moni, acá la chica pregunta si hay algún lugar dónde reciclar las pilas
-Que yo sepa no hay ningún lugar por acá pero si tirás de a una, contaminás menos, decile
El empleado municipal volvió al mostrador y quizá pensando de que yo no me había inmiscuido en su conversación o quizá para darle un matiz más científico al comentario me repitió casi lo mismo que le había dicho la mujer, claro que faltando un poquito a la verdad y al buen gusto:
-Estuve averiguando y acá, por la zona Oeste no hay ningún lugar de reciclaje, pero si desechás las baterías de a una, estarías contaminando menos. También está la posibilidad de enrollarlas con una bolsa de polietileno y papel de diario y tirarlas a la basura. Eso sí, siempre de a una.
Me quedé súper tranquila, porque desde ese momento supe que en Merlo sí hay políticas de reciclaje y de preservación del medio ambiente y, sobretodas las cosas, sus empleados están informados. Yo, igual y por las dudas, sigo guardando pilas gastadas. Quizá en algún momento haga una escultura y me la compre Eveready.
No hay comentarios:
Publicar un comentario